Luego de varios meses de trabajo, la ANEP aprobó el documento preliminar “Marco Curricular Nacional” que ahora se encuentra en etapa de análisis.
Con esta reforma, que va escalonada en años, las autoridades buscan responder a la necesidad de mejorar los aprendizajes de nuestros estudiantes y disminuir las diferencias que aún persisten en el sistema en relación a éstos, profundizar la adecuación al siglo XXI y acentuar el
foco en el estudiante como actor central del sistema educativo.
Desde la ANEP destacan que este documento es parte de un proceso de cambios que vendrá seguido de nuevas etapas.
Para las actuales autoridades educativas, “el currículo debe responder a los cambios sociales y culturales, debe acompasar la definición de aprendizajes necesarios en una dinámica que se desarrolla a partir de procesos de cambio permanente”.
A todo esto, las asambleas técnico docentes de Primaria como de Secundaria rechazaron el marco general de la reforma de la educación promovida por la ANEP. Y desde los sectores empresariales, se entiende que «la velocidad” en la aplicación de una reforma educativa “no es la adecuada».
En diálogo con el programa «Otra Mañana», Adriana Aristimuño, directora ejecutiva de Políticas Educativas y de Planificación Educativa de la Administración Nacional de Educación Pública, dijo «en lo personal estoy convencida de que es necesario un cambio. Y es mucha la gente que está convencida de que es necesario un cambio, mucha la gente del sistema educativo y mucha gente de la sociedad».
